DE CAMINO
Mis pasos se encaminaron al acostumbrado destino ignorantes de la extensión de nada a la que se dirigian.Me pareció oír un rumor insistente en el viento,algo así como una sirena,pero ignoré la alerta hasta que me dí de bruces con el abismo. Tras unos minutos de extrañeza y desconcierto,me dije a mi misma que de nuevo la vida me sorprendía con sus múltiples caras, y que era el momento de abrir mi visor y dar con una nueva ruta que me llevase a mi destino.Un fogonazo interno detuvo mi búsqueda y un temblor sin tierra me arrojo a la nada, no hacía pie y las cosas no tenían perfiles.Allí,suspendida en un fondo sin fondo ni superficie, lo conocido y desconocido surgía y se desvanecía como una especie de plasma que obedecía a mis miedos,pero no como lo había experimentado hasta entonces,porque en esa nada,el miedo a alejarme me alejaba y el miedo a acercarme me acercaba,los deseos centelleaban a lo lejos como estrellas brillantes,agradecí su luz y pensé que así estaba bien,todo pa